Céspedes pidió a los ciudadanos que, si enfrentan esta situación, denuncien el hecho a través de los canales disponibles para identificar a los conductores que incurren en esta práctica y sancionarlos si corresponde.
La ATU explicó que el problema puede deberse a un error de interpretación por parte de los conductores. Recientemente, se modificaron las tarifas tras finalizar la etapa de marcha blanca del servicio. Es posible que algunos choferes aún no se hayan adaptado a los nuevos precios oficiales.
Este reajuste ya ha sido informado a las empresas operadoras, y se está realizando un seguimiento para identificar y corregir estas prácticas, según indicó Céspedes.
Aerodirecto fue diseñado para evitar que los conductores cobren directamente. El sistema tiene GPS que calcula la tarifa según el lugar donde el pasajero sube, y el pago puede hacerse vía QR, Yape, billetera digital, PIN o efectivo. Aunque se busca evitar el efectivo, aún se permite por accesibilidad, especialmente pensando en adultos mayores.
La idea es que el sistema digital controle el proceso de cobro para que los pasajeros paguen lo justo sin depender del criterio del conductor.
Las denuncias deben hacerse desde la misma aplicación de Aerodirecto. Allí hay una sección de quejas y reclamos donde puedes subir pruebas como fotos del boleto o del bus. La ATU asegura que procesa estos reportes para corregir la situación.
Cualquier monto que no coincida con el que aparece en el boleto debe ser reportado. No importa si pagaste en efectivo o de forma digital, la tarifa debe respetarse.
Aerodirecto no es solo para los que van o vienen del aeropuerto. Cualquier persona puede subir y usar este servicio como si fuera un bus más del transporte público. La ATU aclaró que no hay restricciones y que la confusión sobre su exclusividad fue un malentendido.
Esta aclaración es clave porque muchos pensaban que no podían usar el servicio si no tenían que ir al aeropuerto. Ahora se sabe que está abierto para todos.
La respuesta de la ciudadanía ha sido muy positiva, y los buses que antes iban vacíos ahora presentan largas colas. Esto ha llevado a que la ATU, junto a los operadores, evalúe aumentar la cantidad de buses en circulación y reducir los tiempos de espera.
La entidad ya se ha reunido con los responsables del servicio para ajustar la oferta según la demanda creciente.
Depende de la ruta. Por ejemplo, en la zona sur hay una frecuencia de 15 minutos, mientras que en Ventanilla es de 30. Quilca y el centro tienen frecuencias de entre 20 y 25 minutos. Aerodirecto Quilca ya opera las 24 horas, y se está considerando extender este horario a otras rutas.
La frecuencia también cambia durante la madrugada, cuando hay menos pasajeros, pero siempre hay horarios establecidos para evitar esperas largas.
Aunque aún no hay una fecha exacta, la ATU aseguró que pronto se verán más unidades en las rutas. Incrementar la flota implica cumplir con ciertos estándares técnicos, por lo que será un proceso gradual. Sin embargo, ya está en marcha la evaluación para definir cuántos buses se necesitarán según la demanda actual.
La idea es aliviar la carga en horarios punta y mejorar la experiencia para todos los s.